Los empresarios italianos y españoles que participaron en Chocoandino 2010, evento organizado por la Federación Nacional de Cacaoteros (Fedecacao) y el Instituto Italo – Latinoamericano (IILA), expresaron su satisfacción con el cacao colombiano y anunciaron la posibilidad de hacer negocios en el corto plazo e incluso ya se concretaron algunos.

Por medio de la rueda de presentación de empresas, que fue una de las actividades que se cumplió en el marco de Chocoandino, los industriales del viejo continente pudieron contactarse con los potenciales proveedores de Colombia, Perú y Ecuador y dejar abierta la posibilidad de adquirir materia prima para sus productos.

Para ello también fue importante el concurso Chocoandino, con un panel de catación de grano y licor (masa) de cacao, así como de chocolate de mesa, donde expertos italianos, ingleses y colombianos pudieron probar las muestras que se hicieron llegar y dar su opinión de cada una.

Al final, el ganador en el caso del grano de cacao, fue Appcacao, del Perú, con segundo lugar de Coomprocar, de Arauquita; mientras que en licor el primer lugar fue Empresa Virgen de El Carmen, de Perú, seguida de El Agrario, de San Vicente de Chucurí; en chocolate de mesa, aunque se declaró desierto el ganador, se hizo un reconocimiento a Chocolate Superior, de Neiva, y a D´Chucurí, de San Vicente de Chucurí.

Además, el encuentro sirvió para que los artesanos de Italia conocieran de primera mano el trabajo que en el tema cacaotero se realiza en Colombia, al tiempo que ilustraron a otros asistentes sobre los gustos y las preferencias de los consumidores de su país y enseñaron cómo elaborar productos con base en cacao, que pueden cumplir las expectativas de su demanda.

Así mismo, se hizo un llamado a los productores para realizar un adecuado beneficio del grano, luego de la cosecha, porque de ello depende el producto final que los empresarios italianos están dispuestos a comprar a un precio por encima del mercado, siempre y cuando cumpla sus exigencias.

Este anuncio se da en momentos en que el mercado mundial del cacao está agitado por una compra sin precedentes de grano, ante una expectativa incierta de producción por parte de los países africanos y la recuperación de las moliendas, tanto en Estados Unidos como en Europa.

Entre tanto en Colombia el área sembrada va en aumento y se espera que en dos o tres años, algunos de esos nuevos cultivos que ahora se adelantan también en zonas planas y no solo de ladera como era tradicional, empiecen a producir hasta alcanzar el abastecimiento interno y lograr excedentes de exportación, aunque desde ya se están haciendo negocios como los que quedaron perfilados al cierre de Chocoandino.

Por su parte, uno de los industriales italianos, Mirco Della Vecchia, indicó que el cacao andino es el futuro del chocolate gracias a la biodiversidad de estos países y del Amazonas que permite un producto de calidad.

Mientras tanto, el secretario socio económico del IILA, Gustavo Arteta, señaló que los chocolateros italianos buscan productos especiales, cacaos con sabores y aromas específicos y eso lo ofrecen los países andinos.

Se refirió al caso específico de Colombia y manifestó que es difícil que un solo productor ofrezca lo que los artesanos de su país necesitan por lo que invitó a asociarse entre los que tengan cacaos con características similares y realicen un beneficio conjunto para tener el producto acorde con la demanda.

Además sostuvo que los industriales italianos están dispuestos a comprar tanto cacao en grano como licor (masa), es decir, productos semielaborados, que tengan algún tipo de valor agregado y que les garantice que corresponde al alimento requerido.

Entre tanto, el maestro chocolatero italiano Silvio Bessone, recalcó la importancia de todo el proceso, como es el caso de la fermentación y el secado, que son aspectos fundamentales para tener un cacao de calidad y manifestó que la investigación y la integración entre productores e industriales, juegan un papel central.

A su vez, el presidente de London Academy of Chocolate de Inglaterra, Martin Christy, señaló que cada día adquiere mayor relevancia las relaciones entre industriales y productores y manifestó que es importante identificar claramente las características y el origen del cacao, es decir, la trazabilidad. “No es posible hacer el mejor chocolate si no se tiene el mejor cacao”, afirmó.

En el mismo sentido se pronunció el empresario catalán, Enric Rovira, para quien la denominación de origen es un aspecto que países como Colombia debería aprovechar y dijo que lo importante es producir calidad más que cantidad ya que la industria está dispuesta a pagar más por un cacao bueno e invitó a buscar la excelencia del fruto.

Por su parte, el director regional de Operaciones e Integración de la región andina del IICA, Roberto González, sostuvo que mientras otros valoran la heterogeneidad de los cacaos que se producen en la región, aquí no se tiene en cuenta eso y por ello invitó a empezar a hablar de los cacaos que se pueden ofrecer, como una pluralidad y no de un solo tipo de grano ya que se tienen 660.000 hectáreas cultivadas en diferentes tipos de cacao.

Fuente: FEDECACAO