Las mujeres son custodias esenciales de la biodiversidad. La COP16 podría reforzar sus esfuerzos de conservación

2024-10-07

La participación, la voz y la influencia de las mujeres en la conservación de la biodiversidad son fundamentales para hacer frente a la crisis de la biodiversidad. Sin embargo, a menudo se excluye a las mujeres de la gobernanza, el desarrollo de capacidades y la financiación, lo que las sitúa en desventaja y reduce el impacto global de los esfuerzos de conservación. La cumbre sobre biodiversidad COP16 de este año ofrece una oportunidad para cambiar ese statu quo.


Las mujeres de las comunidades rurales y agrícolas de todo el mundo son guardianas de la biodiversidad, organizándose y actuando activamente en favor del uso sostenible, la gestión, la conservación y la restauración de la biodiversidad. Los gobiernos, los actores involucrados y el Convenio sobre la Diversidad Biológica (CDB) muestran un creciente apoyo a estos esfuerzos; sin embargo, las desigualdades de poder siguen reduciendo la presencia de las mujeres entre los responsables de la toma de decisiones.


El género y la inclusión en la protección de la biodiversidad deben seguir siendo una prioridad para los países en la 16ª sesión de la Conferencia de las Partes del CDB (COP16) en Cali, Colombia, que se celebrará del 21 de octubre al 1 de noviembre de 2024. De cara al evento, expertos de la Alianza y de otras organizaciones internacionales expondrán los retos de la implementación con perspectiva de género del Marco Global de Biodiversidad de Kunming-Montreal adoptado en 2022, proponiendo soluciones concretas, con ejemplos claros de casos de éxito, que las Partes del Convenio (casi 200 países y territorios) pueden implementar para asegurar que sus esfuerzos de conservación y uso sostenible de la biodiversidad son sensibles al género.


Apoyar la igualdad de género ayuda a todas las personas y al planeta

Se necesitan medidas decisivas para detener e invertir el declive mundial de la biodiversidad, que converge con las crisis del cambio climático, la nutrición y la inseguridad alimentaria. Los líderes mundiales se enfrentan a decisiones difíciles para hacer frente a estas amenazas existenciales. La inclusión de las mujeres –especialmente de los Pueblos Indígenas (PI) y las comunidades locales (CL)– que están en la primera línea de la conservación y el uso sostenible de la biodiversidad ha demostrado, una y otra vez, ser eficaz en los esfuerzos por lograr cambios significativos en todo el espectro mundial de desafíos.


La biodiversidad es un elemento clave en la lucha contra el cambio climático.


Apoyar a las mujeres en estos esfuerzos requiere financiación y apoyo institucional. Resulta alentador, por tanto, que en la anterior cumbre sobre biodiversidad (COP15) celebrada en Montreal en 2022, las Partes del Convenio adoptaran un Plan de Acción de Género (2022-2030) que proporciona una orientación clara y exhaustiva para alcanzar los objetivos vinculados a la igualdad de género y la biodiversidad. El plan tiene resultados esperados claros, objetivos y acciones indicativas, delineando plazos y responsabilidades.


El Plan de Acción de Género se basa en un plan similar anterior. Afortunadamente, una revisión de la iniciativa anterior ha identificado varios retos que deben superarse para integrar las cuestiones de igualdad de género en la Convención. Entre ellos se incluyen lagunas en el desarrollo de capacidades, la recopilación y el análisis de datos desglosados por género y la elaboración de informes, así como en la financiación.


Presencia y voz constantes

A pesar de los avances, las cuestiones relacionadas con la igualdad de género y la inclusión suelen tratarse como un añadido –en lugar de como parte integrante– de los planes de acción sobre biodiversidad. Esto da lugar a ineficiencias, incluida la forma en que se utilizan los limitados recursos de biodiversidad, y genera oportunidades perdidas. Una mayor coordinación de los esfuerzos entre los numerosos sectores gubernamentales implicados en la conservación de la biodiversidad, y entre los gobiernos, las ONG, las organizaciones de investigación, el sector privado y otros agentes implicados –a nivel local, nacional y regional– podría ayudar a solucionar este problema.


La participación, la voz y la influencias efectivas y sostenidas de las mujeres –en particular, de las pertenecientes a PI y CL, y de otras personas en situación de exclusión– son cruciales para avanzar en la igualdad y la inclusión de género y en los objetivos de biodiversidad, pero en general están ausentes de las estructuras y procesos de gobernanza de la biodiversidad.


La participación y el liderazgo plenos y efectivos de las mujeres de base en los procesos relacionados con la biodiversidad que son fundamentales para sus medios de vida es un derecho humano. La participación plena y efectiva también es esencial para el éxito de la conservación de la biodiversidad porque los grupos de mujeres de base tienen un profundo conocimiento de los ecosistemas locales, las prácticas culturales y las dinámicas de género. Garantizar su participación en la toma de decisiones relacionadas con la biodiversidad es clave para alinear las políticas nacionales con las realidades locales.


Hay que hacer ajustes significativos en el enfoque habitual de género y biodiversidad, y la intención del informe es orientar a los países para que en 2030, cuando concluya el actual Plan de Acción de Género, veamos resultados tangibles y duraderos que demuestren que la igualdad de género ha avanzado gracias a las acciones de conservación de la biodiversidad.


Competencias, personas y lugares adecuados

Los países, incluso con las mejores intenciones de integrar las consideraciones de género en los planes medioambientales, carecen a menudo de la capacidad práctica para lograr resultados. La mayoría de ellos tienen dificultades para incorporar la igualdad de género a sus acciones en materia de biodiversidad, en parte debido a la falta de experiencia y recursos para desarrollar estas capacidades. Para cambiar esta situación será necesario centrar los esfuerzos en la concienciación y en el desarrollo de capacidades de los responsables políticos, los profesionales y los grupos de mujeres para que puedan contribuir plena y eficazmente a los procesos del CDB.


El Plan de Acción de Género esboza acciones para impulsar la participación de mujeres y niñas y mejorar la capacidad de los gobiernos y otros actores involucrados para abordar la igualdad de género a través de políticas y programas de biodiversidad. La plena participación de las organizaciones de mujeres y la dotación de los recursos necesarios les permitirá liderar acciones sostenibles en materia de biodiversidad en sus comunidades. Del mismo modo, los gobiernos que las apoyan necesitan desarrollar su capacidad para entender cómo proporcionar el apoyo adecuado y utilizar su autoridad para trabajar más allá de las barreras políticas o jurisdiccionales.


Los primeros pasos son reforzar las capacidades de los puntos focales de género-biodiversidad y de los representantes nacionales del CDB encargados de apoyar el intercambio de conocimientos, y compartir con ellos las experiencias valiosas y las buenas prácticas, el aprendizaje entre iguales, la tutoría y el entrenamiento en cuestiones de igualdad de género. Otros pasos son adaptar el desarrollo de capacidades a las necesidades específicas, incorporar el aprendizaje práctico e incluir tanto a mujeres como a hombres. Además, los esfuerzos deben alinearse con programas de biodiversidad más amplios.


Lagunas en los datos: colaboración y conocimientos locales

Es fundamental una recopilación de datos que tenga más en cuenta las cuestiones de género, así como el análisis y la aplicación de los resultados, para que la acción en materia de biodiversidad tenga más éxito. El Plan de Acción de Género subraya la necesidad de recopilar datos desglosados por género y otras características sociales relevantes, como la edad y el origen étnico, y de desarrollar capacidades para producir y aplicar estos datos.


El enfoque de Costa Rica basado en datos para desarrollar políticas de biodiversidad sensibles al género

Costa Rica está llevando a cabo análisis de género y evaluaciones de carencias en el sector medioambiental para informar sobre el desarrollo de un Plan de Acción de Género como parte de su estrategia de captura de carbono a través de los bosques (REDD+), utilizando datos desglosados por género de un censo de 2014. El análisis reveló que solo el 15,6 % de los propietarios de granjas eran mujeres y que estas tenían un acceso limitado a la tierra, a la asistencia técnica y a la financiación. Este enfoque basado en datos condujo a cambios sensibles al género en las políticas, la gobernanza y la financiación, para garantizar que las mujeres y los hombres se beneficien por igual de la biodiversidad y los esfuerzos de restauración.


Para una mayor eficiencia, la recopilación de datos para orientar la acción sobre biodiversidad sensible al género debería coordinarse a través de los acuerdos medioambientales multilaterales pertinentes (como las tres convenciones de Río sobre clima, biodiversidad y desertificación). Esto contribuirá a aumentar la cantidad de datos necesarios para orientar acciones más específicas en materia de biodiversidad que tengan en cuenta las cuestiones de género. La recopilación de datos debe abarcar e implicar a los PI, las CL y las organizaciones de mujeres, incorporando sus diversos sistemas de conocimiento. Estos esfuerzos son necesarios para hacer un seguimiento y comprender los avances –o las deficiencias– de los esfuerzos de aplicación de los compromisos en materia de igualdad de género y conservación de la biodiversidad.


Financiación y colaboración a alto nivel

Es crucial más financiación internacional y nacional –tanto pública como privada– para una aplicación de los acuerdos medioambientales mundiales que tenga en cuenta las cuestiones de género. Para un uso eficaz de estos recursos, las inversiones deben ser integradas, coherentes, globales y coordinadas entre las convenciones medioambientales, las políticas y los planes de acción de género, como los adoptados en el marco de las tres convenciones de Río, que incluyen el CDB.


La financiación de la igualdad de género y la biodiversidad suelen ir por separado, pero cada vez se hacen más esfuerzos, por ejemplo a través de políticas exteriores feministas y presupuestos sensibles al género, para combinar estas vías de financiación. Los gobiernos son clave para garantizar una asignación y una utilización eficiente de los recursos, coordinando y alineando la programación medioambiental con los objetivos de igualdad de género.


Sin duda, las organizaciones de mujeres y las iniciativas dirigidas por mujeres necesitan financiación sin restricciones, oportuna y predecible para sus iniciativas de biodiversidad. Fortalecer la capacidad y el acceso de las mujeres, en particular de los PI y las CL, a recursos financieros seguros, activos, créditos y otros servicios financieros mejorará significativamente sus esfuerzos en materia de biodiversidad y sostenibilidad.


Escrito por Marlène Elias, Directora de Género e Inclusión de la Alianza de Bioversity & CIAT. Redacción y edición adicionales de Sean Mattson y José Luis Urrea.


Fuente: ​AllianceBioversityCIAT​​​