Este es el robot diseñado por la compañía Carbon Robotics, que esperan ofrecer de forma masiva a los productores tras obtener una financiación de 27 millones de dólares.
La firma estadounidense Carbon Robotics diseñó un robot agrícola capaz de eliminar hasta 100 000 malas hierbas por hora gracias a láseres de precisión, cámaras de alta resolución y sistemas de inteligencia artificial. Este se suma a otras máquinas ideadas con el mismo principio.
Según el portal Business Insider, la "bestia agrícola" está dotada de inteligencia artificial y 12 cámaras de alta resolución que identifican plantas a tiempo real en una hilera de cultivos. Cuando se detecta una maleza, un láser parpadea y la aniquila instantáneamente.
"Creo que esta será la revolución más grande en herbicidas en la agricultura", aseguró James Johnson, el agricultor de cuarta generación que dirige la granja de Nuevo México que probó el robot este año.
La startup Carbon Robotics, que expandirá esta innovadora tecnología, aseguró una ronda de financiación de serie B de 27 millones de dólares. Con esto se busca evitar el uso de químicos como el glifosato y otros que pueden ser nocivos para la salud humana.
No solo eso, sino que además el uso de pesticidas también ha empeorado las plagas, eliminado microbios beneficiosos en el suelo y contaminado las aguas.
Alrededor de 127 millones de litros de glifosato, el ingrediente activo en herbicidas como Roundup, se usan cada año solamente en Estados Unidos. A raíz de ello, muchas malas hierbas han evolucionado haciéndose más resistentes a la fumigación.
Los autómatas agrícolas como el diseñado y fabricado por Carbon Robotics son idóneos para evitar el uso de químicos, acabando con las malas hierbas gracias al láser, que apunta cuidadosamente a las células de crecimiento de la maleza.
Se trata de un importante instrumento para impulsar la agricultura orgánica que también puede ayudar a almacenar más carbono en la tierra, manteniendo las microbacterias en el suelo y mejorando la nutrición de los cultivos y la calidad y diversidad de los suelos.
Los responsables de la startup afirman que entre 3 y 5 temporadas de cultivo después puede recuperarse la inversión inicial en el robot, que más adelante usaría energías renovables.
Este no es el único robot de su tipo. Una startup de Rosario (Argentina) ideó Gbot con el mismo principio de no usar agroquímicos, sino un robot que detecta y quema malezas con láser. También recolecta datos del suelo para mejorar siembras.
De otro lado, a principios de este año se conoció el proyecto Welaser, una iniciativa formada de un consorcio de 10 empresas europeas para crear un vehículo o robot autónomo con un sistema de visión con inteligencia artificial que discriminará las malas hierbas de los cultivos.
Fuente: ContextoGanadero.