El 27 de marzo se conmemora el Día Mundial del Queso, creado originalmente en Francia en 2001 y luego extendido a diversos países de Europa y el mundo.
“El 27 de marzo se conmemora el Día Mundial del Queso, creado originalmente en Francia en 2001 y luego extendido a diversos países de Europa y el mundo. El queso es una fuente importante de nutrientes como proteínas, vitaminas y calcio, y las numerosas variedades hacen de este un alimento muy versátil para añadir a sus recetas."
En Francia, la Asociación Quesos del Terruño creó en 2001 el Día Nacional del Queso para ser celebrado el 27 de marzo de cada año y recordar a los consumidores y amantes de la comida que el queso francés de leche cruda es un tema nacional importante.
En este país donde se calcula que existen entre 200 hasta 1800 variedades de queso (dependiendo de la clasificación), para muchos es más que un producto alimenticio, sino un símbolo de su cultura, su saber, la diversidad y color de nuestra tierra, la variedad de razas animales que han modelado el paisaje y la reputación gastronómica en todo el mundo, como indicó La guía del queso (en francés).
Otros países europeos adaptaron la tradición y pronto el 27 de marzo se convirtió en el Día Mundial del Queso, donde cada país destaca sus tradiciones queseras locales. Así, el día no celebra ningún queso, sino los quesos de leche cruda, los auténticos herederos de tradiciones culinarias centenarias.
Valor nutricional del queso
El queso comparte casi la mayoría de las características nutricionales de la leche, por lo que es una fuente importante de calcio, proteínas y vitaminas. Su composición nutricional varía en función del contenido de agua que se utiliza en su elaboración. A menor cantidad de agua, mayor concentración de nutrientes por 100 gramos de queso.
El queso contiene proteínas, en cantidad superior que la leche, de alto valor biológico que ayudan a formar, reparar y mantener los tejidos del cuerpo. También tiene calcio, esencial para formar y mantener los dientes y huesos sanos, y es esencial para el funcionamiento del sistema nervioso y muscular.
Es un alimento rico en vitaminas A y D, ambas vitaminas ayudan al cuerpo a absorber el calcio y a mantener los huesos y los dientes sanos. El queso también es rico en vitaminas del grupo B, entre las que destaca la vitamina B12, la B9 (ácido fólico), la B1 (tiamina) o la B2 (riboflavina).
Por su parte, la quesería La Antigua destacó 11 beneficios, entre los cuales añade que contiene todos los aminoácidos necesarios para que nuestro organismo funcione correctamente, así como una gran cantidad de ácido fólico, por lo que es un alimento imprescindible durante el embarazo.
Nos ayuda a fortalecer el sistema inmunológico, por lo que aumentan nuestras defensas contra las enfermedades y es una gran fuente de ácido linoleico conjugado (CLA), relacionado con la prevención de ciertos tipos de cánceres como el de colon.
Fuente: ContextoGanadero